Cuando la gente piensa en el desarrollo personal, al principio se refiere a un trabajo mental con sus pensamientos, creencias, convicciones…
Claro, y es muy importante cambiar la lógica y trabajar con la cabeza, pero no es suficiente. ¿Por qué no?
Porque nuestra mentalidad depende totalmente de nuestros estados interiores más profundos; de nuestros sentimientos. Trabajando con sentimientos se puede cambiar nuestros pensamientos sin especial esfuerzo.
Por ejemplo, imaginamos un contacto entre dos conocidos. Primera persona le dice a la otra sobre su cuestión. Y la segunda persona piensa, que es un juicio y que es mejor no seguir relacionándose con esta persona. Y como resultado de su relación, amistad etc, estará acabada.
Pero el origen de este pensamiento de juicio es más profundo y más oculto. Es un sentimiento, un punto de debilidad interior, que se activa al contacto. Hablando sobre una cuestión de la segunda persona, la primera persona da en el clavo de su dolor. El fracaso interior de la primera persona a veces no lo entiende la segunda persona.
Como ejemplo, un chico (segunda persona) pregunta a su amigo (primera persona) sobre su viaje a Oporto. No sabe dónde está esta ciudad. Su amigo le contesta que tiene que aprender la geografía del colegio de su hijo menor. Y chico se siente tonto. Aquí hay dos caminos de desarrollo de esta situación:
- El piensa que es juicio y no quiere seguir relacionándose con su amigo
- El entiende que su sentimiento que es tonto no depende de su amigo, sino de su dolor interior.
La segunda persona si tiene fuerza para ver este punto débil en sí mismo/a puede sanarlo para conseguir algo mejor en su propia vida y tampoco romper la relación con su conocido. A veces hay que estar agradecidos/das a las personas que nos demuestran nuestros puntos complicados y débiles, y así nos ayudan a crecer con nuestro desarrollo personal.
Una pregunta más importante es: ¿Con qué herramienta se puede transformar nuestros puntos débiles, nuestros estados interiores, nuestros sentimientos complicados de forma más eficaz?
Un método moderno y muy eficiente que se llama GSR.
Se puede aprender para sí mismo/a en 2-3 días de taller online.
También se puede conocer cómo funciona esta herramienta a través de una sesión GSR con especialistas.
Nuestros sentimientos son transpersonales y se basan en unas experiencias de nuestros antepasados. Por ejemplo, algún bisabuelo nuestro tenía un trauma muy fuerte en su vida, y era tan fuerte que no podía enfrentarlo de ningún modo. Es como si estuviera roto en su interior… Sentía mucho dolor… Y nosotros heredamos este dolor por el hecho de nacer en esta familia. Por eso no funciona trabajar con nosotros mismos/as solamente en nuestras cabezas (los resultados llegarán en un corto plazo). Nuestros antepasados tienen sus rastros/marcas en nuestro interior. No se puede trabajar con nuestros bisabuelos, porque están muertos… pero con sus huellas en nuestras almas sí que se puede.
GSR es un método de desarrollo personal más profundo y trabaja con nuestra subconsciencia, en otras palabras, con nuestra alma… Y por todo ello es una herramienta muy ecológica y accesible para todo el mundo.