La identidad de un ser humano se basa en la pertenencia a una familia, clase social, comunidad profesional, género, categoría de edad. Raza, nacionalidad, religión, estatus social: en pocas palabras, una persona puede analizarse completamente. La mayoría de los parámetros son estáticos y ninguno de ellos es vinculante para todos los demás.
Sin embargo, recientemente ha aparecido un nuevo parámetro, que es único. Por un lado, como los demás, denota una cierta pertenencia. Por otro lado, es una idea cualitativamente diferente de un ser humano, de naturaleza dinámica. Denota el avance, el progreso de la intensidad de su autodesarrollo y no solo sus capacidades en el momento actual.
La posibilidad de tal identificación apareció en el sistema GSR y es un parámetro que podría llamarse participación en la evolución de la conciencia humana.
Inicialmente, este parámetro se usaba solo dentro de la comunidad GSR y permitía identificar a los participantes desde un punto de vista profesional. Una jerarquía clara, que no es diferente de cualquier otra esfera: profesores, médicos, etc.
Además, el aspecto estrictamente profesional comenzó a convertirse hacia el exterior y le dio a su usuario ventajas innegables, por ejemplo, en el mercado laboral o en cualquier otro ámbito. Siempre es más rentable contratar a un especialista que pueda cambiarse a sí mismo rápidamente y construir un enfoque más constructivo para el trabajo, el contacto con colegas, clientes; que alguien que no puede hacer esto. Siempre es más agradable construir relaciones personales con alguien que sabe invertir en ellas que con alguien que solo consume constantemente.
Pero si miramos más ampliamente, entonces para una persona que realiza la técnica GSR; incluso la más básica, los parámetros objetivos de la identidad inicial dejan de ser significativos y totalmente determinantes en cualquier cosa en su vida. La prioridad de tal persona es tener la capacidad de adaptarse a los cambios en el mundo, la resistencia evolutiva y la supervivencia.
El concepto de supervivencia es conocido por todo el mundo, mientras que la resistencia evolutiva es un concepto nuevo. Si hablamos de evolución en general, es difícil observar cambios evolutivos en cada individuo, al menos porque no se sabe si este cambio se mantendrá en las generaciones posteriores o no.
Sin embargo, si miramos en su totalidad, no se pueden pasar por alto algunos cambios generales en las especies. Esto es cierto tanto para animales como para humanos. Se avecinan cambios, pero se acercan lentamente. No se observa un crecimiento abrupto, radical e instantáneo.
En general, el proceso evolutivo tiene como objetivo aumentar la supervivencia de la especie. Y el homo sapiens tuvo éxito aquí debido a las características específicas de la conciencia, que es diferente de la conciencia de otras especies.
La baja capacidad de supervivencia fisiológica (falta de garras o veneno, cuerpo débil, falta de independencia a largo plazo de los cachorros, etc.) se compensa con un trabajo de conciencia humana más activo que, a su vez, proporciona supervivencia debido al progreso científico y tecnológico. La tasa de supervivencia está creciendo, pero no a expensas de los recursos internos de una persona; sino a expensas de los externos. Al mismo tiempo, la conciencia humana en sí misma no se desarrolla dejando a las personas al nivel de sus ancestros, con los mismos sentimientos y reacciones; y la investigación científica aún no responde las preguntas básicas del orden mundial y la estructura interior humana. En otras palabras, no hay evolución de la conciencia como tal.
Sin querer menospreciar, los intentos de estudiar la conciencia y la psique de un ser humano se realizaron de manera reiterada; y esto dio lugar a muchos métodos que, si bien no cambian nada fundamental en la base, ayudan a comprender mejor los procesos de alguna manera.
GSR está dirigido principalmente a la evolución de la conciencia humana y en poco tiempo permite que una persona se vuelva más adaptable al entorno externo y aumente la supervivencia precisamente al cambiar los parámetros internos: percepción y reacción. Lo que es especialmente notable es que tales cambios aparecen inmediatamente en todas las generaciones futuras, incluso en aquellas que aún no han nacido. Es decir, cualquier cambio resulta inmediatamente significativo desde el punto de vista evolutivo y da una descendencia más fuerte.
Aumenta la velocidad y la pureza del procesamiento de las señales externas, se amplía el intervalo de su percepción y aumenta la claridad de la diferenciación, la definición de su fuente y las posibles consecuencias. Y todo esto, a través de cambios en la interacción sensorial-reactiva básica con el mundo, cada uno se mete dentro de sí mismo y puede desarrollar continuamente estas habilidades fuera de cualquier condición externa. En otras palabras, el crecimiento se produce en la esfera que no depende del progreso científico y tecnológico general.
Ningún parámetro externo de la vida puede detener este crecimiento y cambio debido al fortalecimiento continuo de los apoyos internos de una persona, en lugar de la confianza habitual y muy inestable en la totalidad de los recursos externos acumulados y bienes sociales.
Al mismo tiempo, GSR tiene muchos niveles, direcciones, cuyo aprendizaje le permite a una persona descubrir las nuevas posibilidades de manera autónoma. Para dominar nuevos mecanismos de conciencia, su desarrollo requiere ciertos recursos internos de una persona y su motivación básica para los cambios. Por lo tanto, la dinámica de GSR no es igual para todos, sino que tiene en cuenta las capacidades personales de cada uno.
Unas personas evolucionan su desarrollo personal de manera más rápida; y las otras van más despacio . Al mismo tiempo, hay una cierta dinámica general de influencia. La capacidad de desarrollarse en la corriente del cambio evolutivo mientras se mantiene esta misma dinámica es la resistencia evolutiva.
Para ser específicos, las diversas habilidades de GSR y los módulos muestran algo más que los parámetros iniciales de los que hablamos al principio. Esta es una oportunidad para adecuar y esclarecer por sí mismo cualquier evento, contacto, estado y ver su esencia, tomar una decisión más equilibrada, la posibilidad de crecimiento no compensatorio en el propio recurso interior, el acceso a la autorrealización y más allá de la personalidad, expandir la conciencia a una plena conciencia totalmente integrada.
Además, es una oportunidad de allanar el camino a lo nuevo para otras personas, mostrándoles nuevas facetas del mundo, transmitiendo una nueva comprensión del mundo, cultivando nuevos valores humanos basados en el crecimiento, el apoyo, la apertura, el amor, aceptación, creación, desarrollo. Todo esto brota poco a poco, pero el más mínimo cambio se integra inmediatamente en la vida cotidiana y ayuda a mejorar todo a nuestro alrededor. Este camino está abierto a todo el mundo. Es bastante simple e inmediatamente proporciona una cierta base que, sin embargo, asegura la creación de cualquier cambio interno. Y un sistema claro de pautas nos permite sumergirse constantemente en el tema tanto como tengamos deseo e interés.
Todo esto es un plano completamente diferente a la filiación social o de género, campo profesional u otras cosas. Estos son nuevos parámetros de un ser humano que determinan la dinámica de su desarrollo y evolución. Es importante señalar que ahora estos parámetros son personales. Tomados en conjunto, todavía no son tan manifiestos como para adquirir la propiedad de carácter masivo y por lo tanto introducir y consolidar un nuevo cambio cualitativo en la dinámica de la evolución general de la humanidad. Sin embargo, esto no tomará mucho tiempo, es solo una cuestión de décadas, durante las cuales la humanidad entrará en una nueva etapa de su desarrollo.
¿Cuál es la conclusión importante que me gustaría sacar de lo anterior? La posibilidad misma de definir e inscribir el parámetro de implicación en la evolución de la conciencia humana sugiere que este proceso ya se ha manifestado en la realidad y está siendo observado. Esto significa que es accesible a todo el mundo y puede ser tenido en cuenta por la sociedad.
La traducción de Irina Komarova para el proyecto GSR World